La cuarta entrega de la saga Misión Imposible, qué se puede decir, muchísima acción y una trama muy enrevesada en este caso que te tiene en vilo todo el tiempo, se hace un poco complicado de seguir el hilo pero está muy bien, parece ser que el agente Ethan se ha ido haciendo cada vez más sofisticado en el sentido de tener juguetes como el mítico James Bond, pero eso ya son palabras mayores, James es un personaje muy trabajado y con una identidad muy señalada, sin embargo Ethan es un agente muy polifacético, que aunque lo intente, denota algo menos de elegancia que el señor inglés, tal vez sea que me encanta James...
En esta entrega es objetivo de una trama que deja a su organización muy mal posicionada, de hecho desaparece y huyendo como fugitivo, junto con sus nuevos compañeros, consiguen salvar el mundo al margen de su organización. Muy recomendable de ver pero un poco fantasma.
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